La D.O.P. ‘Pasas de Málaga’ ampara las uvas pasas obtenidas mediante el secado al sol de frutos maduros de la variedad Moscatel de Málaga o Moscatel de Alejandría, cosechada y secada en la comarca de la Axarquía (en localidades como Moclinejo, Almáchar, El Borge, Cútar, Comares y Totalán) o en la subzona de Manilva.
El secado natural al sol es el tradicional de la zona y el único permitido por el Reglamento, de manera que hace que el producto mantenga unas características organolépticas que la hacen inigualables en sabor, textura y color. El secado se realiza en los paseros, que son superficies donde se extiende la uva para su pasificación, orientadas al mediodía, con una inclinación mínima del 8%, provistas de toldo y soporte para evitar la lluvia y el rocío.
Los racimos una vez secados pueden ser desgranados manualmente, mediante la labor conocida como «picado», o mecánicamente en las industrias. El picado es realizado mayoritariamente por las mujeres, con tijeras de tamaño y forma adaptados a los racimos desecados para no deteriorar la calidad del fruto desgranado. Por tanto las pasas con Denominación de Origen tienen dos formas básicas de presentación, en racimo o en grano.
Es un producto tradicional de más de tres siglos de historia que ha ido renovándose buscando sorprender al consumir con elaboraciones diferentes como la mermelada de pasas de Málaga, perfecta para una merienda o infinidad de postres. Su uso es amplio, desde ensaladas hasta carnes, pescados o dulces.